Si es que esto de los Guilty Pleasures
resulta ser, a menudo, meterse en un berenjenal peligroso de justificar. Pero
ya que lo comencé, bueno, qué menos que darle continuación al asunto, ¿no
creen? Total, la reputación no deja de ser una pesada carga que acaba
resultando del todo prescindible. Queridos, les vendo mi reputación por un
razonable precio. Y si pagan un poquito más, les incluyo en el pack mi sentido
común y mi ética. No desaproveche estas rebajas, señora.
Y comenzaremos la tanda de hoy con un
clásico de los Guilty Pleasures, las canciones-pop-desechables-con-chica... o
como me decía un colega irlandés la semana pasada, “catchy songs sung by pretty
girls”. Cuántas aberraciones se han cometido con ese epígrafe. Y sin embargo,
todavía se puede sacar petróleo de ese pozo. Aunque este tema requiere de un
esfuerzo extra... en fin, vamos allá... Hannah Montana, la virginal estrella
infantil de la Disney, se nos hacía mayor, enfermedad por la que pasaron otras
niñas que la empresa tenía en nómina, aunque me consta que están trabajando en
su cura. Total, que la chica ya no quería ser Hannah, quería ser Miley Cyrus, o
como yo la conoceré siempre, la hija de Billy Ray. Y para demostrar que la cosa
iba en serio, se rodeó de un equipo de compositores profesionales que le
parieron este “Party In The USA” para
la chiquilla.
Bueno, no me negaréis que tiene una
estructura pop muy clasicota, un ritmo que no molesta y una guitarrita que
tiene su aquél. No es ni la típica balada edulcorada, ni el típico tema pseudo
dance que suele inundar la MTV. No hay influencias hip-hop y tal vez si no se
la hubieran vendido a Miley Cyrus, con una producción menos aséptica, se la
podrían haber colado a Sheryl Crow.
Pero no, al final iba a ser la hija de
Billy Ray la que se lanzara al ruedo con dieciséis abriles a cantar este tema,
sin ser un derroche de voz, aunque sin desentonar, y a lucir tejanos extra
cortos y botas vaqueras, y lo digo ahora que ya es mayor de edad... melafo...
Para este segundo tema tengo que
reconocer que la influencia que ejercieron los Strokes en la música popular,
hace ahora ya una década, fue mucho más alargada de la que jamás nos pudiéramos
haber imaginado entonces. Personalizo el tema en la banda de NYC aún sabiendo
que hubieron muchos otros, tal vez mejores, definitivamente muchos otros
peores. El caso es que el pop se fue viendo inundado por ciertas poses que se
movían entre el rock New Age, las sonoridades de los 80's y una cierta querencia
a las pistas de baile donde no sonara ni techno, ni house.
Obviamente todos estos comentarios les
quedan muy, pero que muy grandes a estos tales Zenttric, de quienes lo
desconozco absolutamente todo, y créanme que no siento curiosidad alguna. Pero,
ah, amigos, hay una realidad inamovible: este “Sólo Quiero Bailar” es una canción muy bien ensamblada, con la
aureola pop/rock suficiente como para no caer en la repugnante mediocridad del
hit medio español pero con una capacidad de funcionar en las radiofórmulas.
Dicho de otro modo, con capacidad para gustar a la muchachada pseudo indie sin
muchos rubores y también al público consumidor de Melendis varios. Yo no me
cuento en ningún grupo, ya dije que lo mío es una enfermedad y no vale hacer
escarnio de ella.
Ignoro si la canción es propia de la
banda o trabajo de compositores profesionales, pero la realidad es que nada más
he vuelto a conocer de este grupo. Y me quedo con el estribillo como una buena
filosofía de vida: “si no vas a venir,
avísame pronto, que yo quiero bailar, sólo quiero bailar”. Pues eso,
interpretémoslo como queramos, yo lo hago como un canto al hedonismo
significado en el baile. Bailemos, joder, que el mundo se acaba pronto.
6 comentarios:
Me interesa más la parte de los hits de chorrines que el grupito este, Zenttric, del que no había oído hablar en mi vida.
También es cierto que vivo tan en la parra, que me acabo de dar cuenta, con este post, de que nunca había escuchado ningún tema de la que fuera Hannah Montana.
Entiendo que este tema, es como una versión más inocente y más tímida de un hitazo de una JLo, una Beyoncé, o una Katy Perry... comprensible que según cómo te pille, te llegue a enganchar de mala manera.
Estoy tratando de concetrarme, pero me doy cuenta de que me expongo muy poco o nada a guilty pleasures que sean muy actuales. Tengo que concentrarme en recordar los noventeros...hay mierda de la buena en esa década también.
El de Zenttric es un temazo (de ese Pop con toque británico modernete), y no me duelen prendas reconocerlo:)
Ostras, pues a mi no me han gustado ninguna de las dos :S
Yo soy fan de Miley Cyrus. Ea, ya lo he dicho. Ahora mismo, no mucho. Pero sí de su etapa Hannah Montana, y de su futura etapa country en la que confío.
Ah, por ciero! No compro el de Zenttric...
TOI BROWNSTONE, yo creo que no es lo mismo, que una JLo o una Beyoncé o una Katy Perry se mueven más en las coordenadas del electro y las influencias hip-hop convencionales en cualquier hit de MTV, mientras que esa cancioncilla de la Cyrus se mueve en órbitas de un pop más, digamos, purista. En lo que a los guilty pleasures noventeros... vaya si los hay... de hecho, tengo muchos más, posiblemente porque en esa época consumía radio y tele musical, y claro, quieras que no, topabas con ellos.
VICTOR HUGO SÁNCHEZ SALAMANCA, vaya por delante que me declaro fan de ese nombre tuyo (por lo menos como aparece en internet) tan propio de novela castellana del siglo de oro. Dicho lo cual, sí, el temita de Zenttric es muy brit, cierto.
ROGUE, ok de acuerdo, pero aquí hay que mojarse... tal vez estas no, pero otros guilty pleasures?
EERIE CRIS, no tengo ni idea de su etapa Hannah Montana. De hecho, no conozco ninguna canción más de esta muchacha. Lo que sí me temo es que su carrera como country pop girl de baratillo comenzó y acabó con esta canción, ahora creo que se mueve por otros derroteros más MTV
TOI BROWNSTONE, ok, queda claro
gracias a tod@s y saludos
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