lunes, 22 de diciembre de 2008

Discos 7 Pulgadas

Sirvan estas líneas como un pequeño homenaje a un lugar clásico de Barcelona, de esa Barcelona que no le enseñan a los turistas que vienen de Lloret, de esa Barcelona que tal vez sí, tal vez sea cierto que está desapareciendo. Igual no, pero no me negaréis que el tono tremendista y románticos le suma enteros al texto. Pero vamos, yo a lo mío. Esta entrada va dedicada a "Discos 7 Pulgadas".

Se trata, como el lector avispado habrá podido suponer, de una tienda de discos. O más bien debería utilizar el pretérito imperfecto. Hasta donde yo recuerdo, debe hacer más de un lustro que cerró. Claro, el concepto tienda de discos comienza a ser algo camino de perderse en el túnel de los tiempos. Y si le añadimos el adjetivo "pequeña", para qué os voy a contar. Era un sitio especial, unos irreductibles, algo así como la aldea de Astérix.

Para comenzar, el nombre de la tienda no era porque sí. Su especialidad eran los vinilos, de hecho, durante mucho tiempo ni siquiera vendían CD, y más adelante, este formato sólo ocupaba un cuarto del espacio disponible. Además, aún estando en el centro de la ciudad, no estaba en la clásica calle Tallers, que aglutina las tiendas de discos como si de una calle gremial de la Barcelona medieval se tratara. Y que Dios, Satán o Ron L. Hubbard bendigan la calle Tallers y sus establecimientos. Pero siempre me hizo gracia la rebeldía de montar la tienda en la calle Comptal.

Ahora en su lugar hay un locutorio, o una panadería con consumición, o algo así.

Cuando frecuentaba esa tienda, yo era consumidor principalmente de CD's. Luego también compré vinilos, pero ése era un formato que sólo consumía de 2ª mano y a precios baratos, por lo que los maxi-singles de Guns n' Roses que había, aunque fantásticos, estaban fuera de mi punto de mira. Lo curioso era el desprecio que se le daba al CD. Los tenían en una suerte de aparador cubierto con una reja que impedía que sacaras el CD y lo tuvieras en tus manos. Sólo podías ojearlo y casi ver el lomo. Si lo querías, la dependienta te abría esa jaula de CD's. Además, por si fuera poco, les hacían una extraña muesca en los lomos del CD. Aún hoy no tengo ni idea del por qué. Y sin embargo, los precios estaban bastante bien, y compré discos estupendos allí. Tal vez también porque en aquella época estaba descubriendo clásicos pretéritos, como Kiss o Velvet Underground, y contemporáneos, como D-Generation o Screaming Trees. CD's de esa gente cayeron en mis manos desde Discos 7 Pulgadas. Y por eso, damas y caballeros, aunque sólo sea por eso, bien merecen este homenaje.

Canciones:

Jeff Buckley: "Lover, you should've come over"
Led Zeppelin: "Inmigrant Song"
Los Canarios: "Get on your knees"

13 comentarios:

Anónimo dijo...

YO era un tipico de 7 pulgadas, el Pulgo lo llamabamos... a mi amiguete incluso le fiaban. YO me compre alli monton de singles en vinilo de los Hellacopters y el de buckcherry.

Aunque me suena haber hablado de esto ya en este blog, no?

Belén dijo...

Vaya, como duele que cierren estas cosas... como lo siento...

Besicos

Anónimo dijo...

Solía ser la última parada de los sábados por la tarde enhace muchos muchos años. Después de la calle Tallers atravesavas las Ramblas llegabas al Corte Ingles y allí en portal del Angel siempre había una gente bailando o dando la vara según se mire, cruzabas y adentrándote en aquella calle allí estaba 7 pulgadas con su pequeño escaparate dónde solían reposar las ultimas novedades y su interior que tan certeramente has descrito. Una pena, un recuerdo de una época que nunca volverá.


Saludos y Feliz Navidad.

kar dijo...

LORENZOMBIE, la memoria te falla... eso lo hemos hablado antes, sí, pero no en el blog, sino en vivo y en directo, creo que la última vez que nos vimos. Qué grande el Pulgo!

BELÉN, sabe mal, sí. Supongo que mis millones de lectores que cuando se publicó "Document" aún no habían nacido, no deben saber ni de lo que hablo... y lo que es peor, me deben imaginar con el pelo blanco, una boina, bata y zapatillas.

MANURHILL, ésa era exactamente la ruta que se hacía.

saludos

Unknown dijo...

Las viejas tiendas de discos, los viejos cines, todo lo viejo desaparece. En Madrid ocurre exactamente eso, en la busqueda constante del mega centro comercial y la perdida de esos sitios tan entrañables. Una verdadera lástima.
Saludos desde la cueva.

Aitor Fuckin' Perry dijo...

Te entiendo pefectamente, en Pamplona han cerrado todas y sólo queda El Corte Inglés, una pena, ya sólo queda comprar por correo, y la cosa va a peor.

Möbius el Crononauta dijo...

Ojalá tenga suerte y empiece a ganar lo bastante para apoyar esas pequeñas y encantadoras tiendas de discos, o acabarán desapareciendo todas.
Merecido homenaje para una especie, por desgracia, en vias de extinción.

Saludos

sammy tylerose dijo...

No era de mis favoritas (como me jodían esos cd's enjaulados!), pero era un clásico. Que recuerde, allí me compre una camiseta de hellacopters (época payin'the dues) y el she's the one de petty. ay como algun dia cierren las de tallers, donde ya quedan muy poquitas.

Anónimo dijo...

Perdone que comente off topic. He visto un comentario suyo en Riff Fanzine donde teme por la versión castellana del próximo Ellroy. No se apure. Si le gustaron América y Seis de los Grandes, Blood's a Rover estará al mismo nivel.
La fecha prevista de publicación en castellano es febrero 2010. En inglés saldrá en noviembre 2009.

Para que la espera no sea tan larga, Ediciones B publicará el próximo mes de junio "Hollywood Nocturnes", publicada en inglés en 1994. Se trata de una recopilación de relatos cortos donde Ellroy retoma las andanzas de viejos personajes conocidos por todos sus lectores: Dick Contino, Mickey Cohen, Buzz Meeks, Howard Hughes, etc.
Le agradecería que transmitiera esta información al foro de Riff Magazine.

Atentamente,
Lynette S. Tedrow

Anónimo dijo...

Hey, recuerdo esa tienda! Una vez me compré un cd de Alice in Chains de oferta. Al llegar a casa vi que la caja del cd tenía una muesca y pensé que por eso estaba rebajado.
El 7 pulgadas era una tienda diminuta, la jaula donde tenían los cds era un poco conyazo. Pero como se ha comentado por aquí, era la última parada del sábado por la tarde, tras pasear por la calle Tallers.
Cada vez que regreso a Barcelona me encuentro con menos tiendas de discos. Las pocas que quedan, sin embargo, tienen buenos precios en la mayoría de los cds, no solo en los de serie media, de manera que, a diferencia del resto de la humanidad, hoy en día compro más cds que cuando era una triste estudiante de traducción con una
semanada irrisoria.
Saludos,
Yoyo

Anónimo dijo...

Hola!!!
Un amigo acaba de enviarme este enlace. Soy el propietario de lo que fue 7 Pulgadas. Gracias primero por el pequeño homenaje.
Y añadir una explicación: las muescas de los CD'S se hacían en origen. Eran discos descatalogados y las compañías discográficas les hacían esas marcas al venderlos a bajo precio. Más que nada para evitar impuestos a pagar. Esos discos recibían en origen otro tratamiento fiscal. Nosotros acabábamos pagando los mismos impuestos, pero los fabricantes no.
En fin, espero haber aclarado el asunto.
Hasta otra

kar dijo...

juer! pues muchas gracias por el comentario, me ha encantado leerlo... y decirte que la tienda me encantaba! ya no escribo en este sitio, me mudé a un alojamiento nuevo, www.notasdekar.com y me gustaría que me leyeras allí.
Así mismo, si tuvieras otro proyecto musical o cultural (tienda, bar, lo que sea) que creas interesante, si me lo comentas y mola, puedo hablar de ello.

Un saludo

Diaris de La Resistència. dijo...

ROMAN+MAMEN, MAMEN+ROMAN = 7pulgadas.
larga vida a ellos por que nos hicieron pasar momentos inolvidables...
y ya de paso GRACIAS a MARYLIN, PAN y MUSICA, ZERO y alguna mas de recientes, pero estas son las que nos marcaron una buena epoca imperdible.
xavi.