miércoles, 9 de mayo de 2012

London Calling


Esto de los juicios de valor hechos desde el desconocimiento, es lo que tiene… Cuando empecé a escuchar rock n’ roll oí hablar de una banda llamada The Clash. Se hablaba de ellos como uno de los grupos seminales del punk británico. Se suponía que tenía que ser la hostia. Duro y directo como un puñetazo. Como un escupitajo en la cara. Se hablaba, principalmente, del disco “London Calling”, que tenía esa portada con ese destrozo de guitarra. Bueno, para un ignorante en cosas del punk, si algo tenía que significar el concepto “punk”, tenía que ser, forzosamente, aquello. Y cuando escuché por vez primera el disco… bueno, digamos que me sorprendió. Aquello no sonaba tan duro ni tan rápido ni tan directo como yo tenía en mente. Supongo que son cosas de haber escuchado música de los 90’s (pongamos nombres desde Guns n’ Roses hasta el mundo grunchi)… ¿y aquello era punk? Quiero decir, no es que no me gustara, no era eso. Pero no era un puñetazo ni un escupitajo ni una botella rota contra la pared… aquello era una amalgama de rock n’ roll, cositas de pop y algo de ritmos caribeños. De algún modo, me pareció “blando”. Supongo que “London Calling” puede descolocar fácilmente, desde luego, no es "Nevermind The Bollocks”… he oído decir sandeces como que “London Calling” y The Clash eran más punk por la actitud que por su música en sí. Como si eso tuviera la menor importancia.

En cualquiera de los casos, significara lo que significara, “London Calling” resulta ser un disco de los que requieren de atención y escuchas, pero que a su vez, proporcionan momentos y matices que a veces pasan inadvertidos de entrada.


Por alguna razón que no acierto a comprender, me he levantado con “London Calling”, en esta ocasión me refiero a la canción, en la cabeza. Y automáticamente me ha llevado a un momento y a un lugar. Sala Màgic, en Barcelona. Años ha. Hora: las perritantas de la madrugada. Cerca de la hora de cierre. Íbamos 3 individuos, en un estado etílico deplorable. Uno del trío llevaba un estado etílico aún más deplorable que los demás. En un momento, los otros dos me abandonan, uno iba a acompañar al tercero al lavabo, a ver si se espabilaba. La nebulosa puebla mi mente. De modo inesperado, tengo una de esas experiencias místicas, como si me desdoblara, y una parte de mí sale del cuerpo, hacia el exterior, y me veo a mí mismo, desde fuera, subido en el (mini) escenario de Màgic, solo, cantando y bailando “London Calling” como si me fuera la vida en ello, como si tuviera que ser el elegido para sustituir al malogrado Joe Strummer. Nunca una canción me pareció tan cojonuda.

Canciones:

The Clash: “London Calling”
Counting Crows: “Rain King”
Little Caesar: “Every Picture Tells A Story / Happy”


6 comentarios:

Toi Brownstone dijo...

Perdí mi copia de London Calling en mi proceso de "viudedad", tengo pendiente hacerme con una copia, aunque ahora mismo lo veo, dentro de la discografía de The Clash, bastante flojo, eso si, la portada es inmensa. Típico disco que tienes que tener "porque si", como el Marquee Moon de Television, que me resulta un coñazo tremendo.

Hace unos meses me dio una fiebre de Strummer-Clash brutal, la verdad es que cada vez me gustan más.

Magic, tajismo y escenario...qué recuerdos! De esas experiencias místicas que cuentas tuve unas cuantas, no sé qué demonios tenía ese escenario, pero era lo más. Si te digo que alguna noche hice stage-diving a petición popular, te lo crees?

Las noches de Magic, el garrafón, y sus resacones dan para un post.

Víctor Hugo dijo...

Este disco me lo compré recomendado por un buen amigo y tiene temas interesantes y legendarios como el London Calling, pero me da la sensación como de que va perdiendo fuelle a lo largo del minutaje...

¡Slaudos!

rogue dijo...

Siempre sufro cuando alguien cuenta melopeas de ese calibre....yo nunca en mi vida he bebido tanto, ni ganas la verdad...
Otro disco que tengo visto de casa pero no recuerdo en concreto aparte de ese tema que le da nombre. Mi cerebro es un desastre.

kar dijo...

TOI BROWNSTONE, yo no lo calificaría de "bastante flojo" ni mucho menos, sólo que me lo esperaba más duro, más agresivo. En lo que a Marquee Moon, de Television, bueno, fue un shock encontrarme con "eso" pero con el tiempo le he acabado pillado el puntillo. Y haz, haz ese post acerca de Magic, por Dio...

VICTOR HUGO, no sé si pierde fuelle, yo no creo que esté descompensado, porque los buenos temas están bastante repartidos a lo largo del mismo, pero sí, algunas canciones destacan por encima de las otras claramente, sin proporcionar una sensación de conjunto.

ROGUE, lo de la bebida, ya sabes, como cualquier sustancia estimulante, tiene sus cosas buenas y sus riesgos. No hay más. Pero puede ser muy divertido, si no, cómo habría conseguido colocarse, de un modo tan global y desde la noche de los tiempos en el top 1 de las sustancias? Cuando mencionas "de casa" puedo entender "de casa de tus padres"? pues qué casa más rockera era esa! O tal vez de tu casa y no encuentras ese disco? Sea como sea, dale una oportunidad, seguro que conforme lo escuchas, vas recordando y apreciando más canciones!

gracias por los comentarios y un saludo!

rogue dijo...

De casa de mis padres, en mi casa los discos que hay son todos de mi novio :) Yo no tengo propios.

kar dijo...

ROGUE, pues investiga, que tus padres, entonces, y por lo que cuentas, tienen buen gusto...