Ayer volví a ver “Alta Fidelidad”, la película de Stephen Frears con John Cusack. Desde que la vi en su estreno, y hablamos de 2000, siempre me ha gustado. No he leído jamás el libro original de Nick Hornby en el que se basa la cinta. Tal vez lo haga algún día. Pero la peli la he visto varias veces. Y aunque las referencias musicales no sean todas ellas fantásticas, y uno siempre estaría en plan quítame aquí ese Bruce Springsteen y pon por allá a Pearl Jam, tiene guiños interesantes. Por no hablar de el elenco, donde evidentemente brilla John Cusack, pero que también es destacable por Jack Black, un tipo que a menudo malgasta su talento en gilipoyeces, pero que en “Alta Fidelidad” borda su papel de talibán musical, muy divertido. Y ojo a ese “Let’s Get It On”, de Marvin Gaye, que se marca, realmente lo hace muy bien. El cameo de Tim Robbins está bien y el de Catherine Zeta-Jones es bastante ridículo. Ahora, la que brilla con luz propia es la guapísima Lisa Bonet, que si bien muestra un aspecto extremadamente delgado, no deja de desprender morbo.
Lo peor de esa película es que hay aspectos de ella que me recuerdan a mí. A veces demasiado. Un poco es como si te estuvieras viendo, como si te estuvieran diciendo una serie de verdades en forma de representación. Y la verdad, a veces, no es agradable. Las verdades a veces duelen. “Quiero la verdad!!!” gritaba ese Tom Cruise de marinerito punta en blanco, con su voz de nenaza histérica que le ponen en el doblaje al castellano, en el juicio de “Algunos Hombres Buenos”. Y un hierático Jack Nicholson sentado en el banquillo de los testigos le replica algo así como “Chico, tú no puedes admitir la verdad”. La verdad, amiguitos, es un concepto sobrevalorado.
Y es que “Alta Fidelidad” no va de música y friquismo hacia ella. “Alta Fidelidad” habla de madurez y de sueños por cumplir. De esperanzas inútiles que nos traban la vida, de querer ser, de llegar a ser. Y de obsesiones, claro. Que no tienen por qué estar tan mal. A veces.
Canciones:
Marvin Gaye: “Let’s Get It On”
Blind Melon: “Galaxie”
Love: “Always See Your Face”
Lo peor de esa película es que hay aspectos de ella que me recuerdan a mí. A veces demasiado. Un poco es como si te estuvieras viendo, como si te estuvieran diciendo una serie de verdades en forma de representación. Y la verdad, a veces, no es agradable. Las verdades a veces duelen. “Quiero la verdad!!!” gritaba ese Tom Cruise de marinerito punta en blanco, con su voz de nenaza histérica que le ponen en el doblaje al castellano, en el juicio de “Algunos Hombres Buenos”. Y un hierático Jack Nicholson sentado en el banquillo de los testigos le replica algo así como “Chico, tú no puedes admitir la verdad”. La verdad, amiguitos, es un concepto sobrevalorado.
Y es que “Alta Fidelidad” no va de música y friquismo hacia ella. “Alta Fidelidad” habla de madurez y de sueños por cumplir. De esperanzas inútiles que nos traban la vida, de querer ser, de llegar a ser. Y de obsesiones, claro. Que no tienen por qué estar tan mal. A veces.
Canciones:
Marvin Gaye: “Let’s Get It On”
Blind Melon: “Galaxie”
Love: “Always See Your Face”