lunes, 11 de junio de 2012

The Afghan Whigs y las pataletas


Los Afghan Whigs pertenecen a esa clase de bandas que situaba en mi Olimpo particular, especialmente porque llevaban doce años en barbecho y estaba convencido de que nunca iba a verles sobre las tablas. Es de esos grupos que uno consideraba que pertenecían al pasado, y éste no iba a volver. En los últimos años me he llevado, sin embargo, muchas sorpresas sobre este particular. Si me lo hubieran preguntado hace tres lustros, jamás hubiera creído que presenciaría conciertos de Kiss con maquillaje, de Iggy & The Stooges, de Redd Kross, de The Police o de los que nos ocupan, The Afghan Whigs.

Conocí a los Afghan Whigs en mi época más fanática de Popular 1, cuando lo que leía en esa revista resultaba ser poco menos que las Sagradas Escrituras. Eran una banda, además, de la que casi sólo se hablaba en esas páginas. Eran un grupo fetiche para la publicación. Por aquél entonces sacaron su último disco al mercado, y lo recuerdo como si fuera ayer, volver de la tienda aquella tarde con dos CD’s en la bolsita, “1965” de los Whigs y “100% Colombian” de los Fun Lovin’ Criminals.

Pero los Afghan Whigs eran diferentes. Los Criminals habían tenido un hit clarísimo que había pegado fuerte en las listas, y tenían su popularidad, que aumentaría con ese portento de disco que es “100% Colombian”. Los Afghan Whigs eran una suerte de desconocidos, por lo menos a nivel popular, por lo menos en la Celtiberia. Durante un tiempo se anunció una fecha de concierto, sería por mayo de 1999, en la desaparecida Sala Garatge. Sí, os juro que recuerdo haber visto eso, en aquellos folletos con listas de conciertos que se repartían en algunas tiendas de discos. Por supuesto, esa actuación nunca se llevaría a cabo, y muy poco después, Afghan Whigs confirmarían su separación.


El concierto de Barcelona entero

Y aunque ya tenía “Black Love”, muy pronto “1965” se convirtió en mi disco favorito de los Whigs. Tenía guitarras, tenía soul, tenía momentos festivos, tenía esa intensidad que si uno no se mete a fondo en la canción, puede parecer casi impostada y algo ridícula. Más tarde escuché “Gentlemen”, pero siempre estuvo en un estrato, para mi gusto, inferior a “1966” y a “Black Love”.

Y bien, tantos años más tarde, sin, desde luego, esperármelo, resulta que Greg Dulli reúne a la banda y por si fuera poco, anuncian fecha en el marco del Primavera Sound. Evidentemente no iba a dejar escapar esa ocasión, si bien lo he reiterado varias veces: no me gustan los festivales. Pero es lo que hay, cosas del rock n’ roll de hoy en día.

Y ya lo sabía, que iban a tocar una hora justa. Aún así, cuando Dulli dio por finalizado el show, escenifiqué lo que se conoce por “quedarse con cara de tonto”. Por supuesto que había disfrutado de muchos momentos del concierto. La banda estaba muy sólida, y Greg Dulli ejercía con maestría de estrella de la función. ¿Qué falló? ¿El repertorio? En parte sí, a verdaderas joyas se le sumaban temas que yo considero claramente prescindibles. Y luego mi ansiedad… esto se acaba y no han tocado aún “Faded”… ni “John The Baptist”… ni “Something Hot”…

Y cuando acabó, tras mi momento de quedarme estupefacto, la siguiente reacción fue de cabreo. No era culpa de los Afghan Whigs. Tampoco era culpa del festival, en ningún caso dejaron de cumplir lo establecido, un hora y listos. ¿El repertorio? Cada uno elegiría el suyo. Fue una actitud algo infantil, de un niño que se enfada porque las cosas no son como él quiere que sean. Pero fue así.

Al día siguiente, por la tarde, me puse a recordar el concierto. Y revisé las imágenes que están colgadas en Youtube (si buscáis, podéis ver el concierto entero en calidad profesional). Y bueno, me alegré de haber estado allí. Me reconcilié con Greg Dulli y los suyos. ¿Podía haber sido mejor, más emotivo, más bonito? Yo creo firmemente que sí. Pero que me quiten lo bailao.

PD: Después me pasé a ver a Mudhoney un rato, y sorprendentemente, pues se trata de un grupo que apenas conozco, me dieron muy buenas sensaciones. Me recordó lo mucho que me gustaba el llamado “rock alternativo” de los 90’s. Y no me vengáis con eso de las “etiquetas” y blablablá… de algún modo hay que llamarlo. Me encantó vivir el momentazo “Touch Me, I’m Sick”

Canciones:

The Rentals: "Friends Of P"
The Black Crowes: "Welcome to the good times"
Jack White: "Sixteen Saltines"

7 comentarios:

Unknown dijo...

Grandísima entrada, y me ha gustado mucho la referencia a Mudhoney, banda infravalorada donde los haya y con un aporte al grunge mucho más importante de lo que pensamos.

Toi Brownstone dijo...

Cuando idolatras a una banda que posee una potente discografía plagada de hits, es fácil quedar frustrado con un set list adaptado a una hora de extensión. Está claro que al igual que tú, hubiese cambiado algunos temas por otros, y por supuesto hubieran tocado dos horas, y no precisamente en el Primavera, ni siquiera en el ARF, sino en una sala tipo Bikini.

Pero bueno, así es la vida, y no me voy a quejar. Después de mis particulares decepciones con Manic Street Preachers y Soundgarden, causadas por una frialdad y una falta de emoción brutales, ver a Afghan Whigs dándolo todo, y a Dulli confirmando su gran forma en todos los sentidos, fue un motivo de inmensa alegría. Y si, como ya dije, necesitaba vibrar y emocionarme y lo conseguí.

Fue precisamente durante el concierto de Mudhoney cuando me encontré a Dulli y pude compartir unos minutos con él, así que aunque no sonaban mal, con todo el subidón, las cervezas y el intento de centrarme un poco, no me enteré demasiado de su actuación. Es más, fue el destino el que me forzó a estar ahí, yo tenía intención de ver a White Denim.

Me alegro de que te recuperaras del shock inicial y no acabases tan decepcionado como lo estabas en un principio.

Toi Brownstone dijo...

Cuando idolatras a una banda que posee una potente discografía plagada de hits, es fácil quedar frustrado con un set list adaptado a una hora de extensión. Está claro que al igual que tú, hubiese cambiado algunos temas por otros, y por supuesto hubieran tocado dos horas, y no precisamente en el Primavera, ni siquiera en el ARF, sino en una sala tipo Bikini.

Pero bueno, así es la vida, y no me voy a quejar. Después de mis particulares decepciones con Manic Street Preachers y Soundgarden, causadas por una frialdad y una falta de emoción brutales, ver a Afghan Whigs dándolo todo, y a Dulli confirmando su gran forma en todos los sentidos, fue un motivo de inmensa alegría. Y si, como ya dije, necesitaba vibrar y emocionarme y lo conseguí.

Fue precisamente durante el concierto de Mudhoney cuando me encontré a Dulli y pude compartir unos minutos con él, así que aunque no sonaban mal, con todo el subidón, las cervezas y el intento de centrarme un poco, no me enteré demasiado de su actuación. Es más, fue el destino el que me forzó a estar ahí, yo tenía intención de ver a White Denim.

Me alegro de que te recuperaras del shock inicial y no acabases tan decepcionado como lo estabas en un principio.

Toi Brownstone dijo...

Perdona por los comentarios repetidos, has cambiado los del captcha y se han duplicado :S

Möbius el Crononauta dijo...

¡Los artistas son malvados por no tocar nuestras canciones!
Y yo también me alegro de la mención a Mudhoney y su inmortal "Touch Me..."

Jim Garry dijo...

Me he descojonado con eso de Popular 1 y las Sagradas Escrituras. A mi me sucedía algo similar.

Mi favorito de Afghan Whigs es Black Love pero en su día a 1965 no le di la cancha que se merecía. Lo que has escrito aumenta mis ganas de hacerme con el.

Sex, love and rock´n soul

kar dijo...

ALEX PALAHNIUK, sinceridad obliga, no conozco gran cosa de Mudhoney, siempre fueron, ya los sabes, los eternos desconocidos de Seattle... pero ése single y la portada de ése disco ES el grunge...

TOI BROWNSTONE, qué puedo decir, me perdí tristemente a los MSP y me consuela saber que no estuvieron a la altura de la leyenda. Lo de Soundgarden, mira, no me esperaba gran cosa, la verdad: Cornell había caído demasiado bajo. En cuanto a tu encuentro con Dulli, mola que sea un tío tan ... tan... no me gusta el término, pero es que encaja a la perfección... tan COOL como parece!

TOI BROWNSTONE, no sé qué hostias es un captcha...

MÖBIUS, sí lo son!! malvados que les gusta jugar con sentimientos ajenos ;-)

JIM GARRY, pues tírate a 1965 de cabeza, tú que eres amante del rock y del soul... pues me parece uno de los discos que mejor se mueven en ambos niveles...

muchas gracias a tod@s por los comentarios!