lunes, 12 de diciembre de 2011

Houellebecq


Pocos escritores contemporáneos me han dejado más profunda huella que Michel Houellebecq, francés de apellido imposible, a quien descubrí hace poquito más de un año. Es por eso que el hecho de que se publicara, en este 2011, una nueva novela suya, “El Mapa Y El Territorio”, supuso un pequeño acontecimiento para mí. Como suele pasar en estos casos, había también un cierto temor. ¿Sería Houellebecq capaz de mantener el nivel que había expuesto en sus anteriores obras? Y aunque “Plataforma” y sobretodo “Las Partículas Elementales” habían dejado un listón muy alto, “El Mapa Y El Territorio” no decepciona. No creo que sea, como se dice en algunos círculos, su mejor novela (para mí, lo es “Las Partículas Elementales”), y sin embargo, no decepciona en absoluto.

En cualquiera de los casos, esto es literatura, no una competición deportiva. No hay un primero, no existe un podio que el trío que llegó antes ocupará. En esto de la literatura, mi criterio es sencillo. Para mí, lo peor que le puede pasar a un libro es que lo cierres, y no te provoque pensar en él, ni que sea un rato. Y que, finalmente, lo acabes olvidando por completo. Un libro te tiene que generar sensaciones. Partiendo, pues, de esta premisa, las tres novelas que he leído de Houellebecq (las tres citadas), desde luego, cumplieron su cometido.

De esta guisa se presenta Michel Houellebecq en la contraportada de "El Mapa Y El Territorio"
Todo lo que he leído de él destila nihilismo y deja un poso deprimente. Pero no lo hace contando “historias tristes”, sino de un realismo brutal. Hurga en las heridas de la sociedad actual, sin dejarse llevar por la contención que lo políticamente correcto obliga, por lo que es, a menudo, admirado y odiado a partes iguales. A estas alturas, el lector de estas líneas ya debe saber en qué lado me posiciono. En realidad hay algo de filosofía y mucho de descripción en sus libros.

El Mapa Y El Territorio” incide en los aspectos de la soledad, la relación entre personas (o la falta de ella), la melancolía, envejecer y la consecución de metas, el sexo como medio o como fin, y todo ello con más cinismo e ironía incluso que en los otros títulos suyos, los mencionados “Plataforma” y “Las Partículas Elementales”. Temas, éstos, recurrentes en las tres novelas.

Yo ya tengo en mis manos el primer libro que publicó, “Ampliación Del Campo De Batalla”, recién comprado, en un ejercicio obsesivo. De modo que no puedo dejar de recomendar cualquiera de las tres novelas que he leído de Houellebecq hasta el momento. Especialmente “El Mapa Y El Territorio” y “Las Partículas Elementales”.

Canciones:

The Rolling Stones: “Empty Heart”
Mother Superior. “Fuel The Fire”
Hole: “Miss World”


4 comentarios:

sammy tylerose dijo...

Yo leí "Las partículas elementales" hace unos años y me dejó perturbado! El libro más duro que leído. Como tengo miedo a que se repita el trauma, no he leído nada más de este hombre!

kar dijo...

SAMMY, entiendo lo que me dices, la expresión es esa, "Las Partículas Elementales" perturba! No sé si por masoquismo o lo que sea, pero estoy ahora en una fase muy Houellebecq, tras haber acabado "El Mapa Y El Territorio", que sin duda alguna, te recomiendo... no es tan durillo como "Las Partículas...", pero desde luego, no te deja indiferente. Yo de ti, le daría un tiento.

Un saludo!

sammy tylerose dijo...

No se no se, esa espalda partida por un rabo XXL no se olvida facilmente!

kar dijo...

SAMMY, juas... si sólo fuera eso...