miércoles, 9 de enero de 2008

R.E.M. : Una década complicada (1)

El 31 de marzo tiene prevista la salida al mercado del nuevo disco de R.E.M., que titularán Accelerate. Hace unos años, cualquier lanzamiento de los de Athens era tratado con pasión. Y es que la carrera de R.E.M. siempre estuvo trufada de grandes, grandiosos momentos. Sin embargo, no podemos soslayar una obviedad: hace ya demasiados años que no graban un gran disco. Y es que reconozcámoslo, los diez años que transcurren desde 1998 hasta 2008 han sido, cuanto menos, complicados.


Si volvemos al pasado, todo parece indicar que hay un precedente que marcó, probablemente de modo casual, un antes y un después: la marcha de Bill Berry. En la historia de R.E.M. hay varios períodos. El primero, de 1980 a 1985 viene marcado por un inicio en la banda, establecida en el underground. Sus discos de esa época son buenos, pero sin duda lo realmente grande viene en el período 1986-1990: "Life's Rich Pageant", "Document" y "Green"... toma trío de discazos. Pasan de ser la banda más admirada del underground americano a fichar por una multinacional, Warner, y todo eso sin perder un ápice de credibilidad. El siguiente período se sitúa entre 1991 y 1996, y es la etapa de la fama. El grupo se convierte en un dinosaurio, ventas millonarias, discos excelentes, tan buenos como los anteriores, diferentes a ellos, eso sí, respetados y admirados.

En 1995, en plena gira mundial presentando su injustamente infravalorado "Monster", el batería Bill Berry sufre un aneurisma cerebral que le muestra la cara de la muerte de cerca. Al final todo queda en un susto, un susto que sin embargo hace que Berry abandone a R.E.M. Bill Berry siempre había sido el chico tranquilo, un tipo campechano que se sentaba tras la batería. Nunca creyó que se convertiría en una superestrella del rock, no le iban mucho ni las giras mundiales, ni las fotos de promo ni las entrevistas. Y aquél accidente fue demasiado para él. Durante la gira, había grabado con el grupo el disco "New Adventures in Hi-Fi", un disco que sin ser malo, pecaba de disperso y de demasiado largo. Un tema rockeaba y otro experimentaba con bases techno. Una canción era fantástica, como el single "E-Bow the letter" y otra era completamente prescindible. Un corte se grababa en una prueba de sonido y otra en un estudio. Cabe decir que por aquél entonces, R.E.M. era la gran banda, de hecho, ese disco era el primero que grababan tras firmar el contrato por aquél entoces más sustancioso de la historia de la música, con la compañía Warner. Ese récord pronto sería superado, claro, pero no perdamos de vista ese dato: en 1996 R.E.M. eran el grupo mejor pagado por sus discos del mundo.

Bill Berry. Un batería, una ceja.


Aquella baja del batería desató la polémica. Y aunque la banda había declarado en el pasado que si en alguna ocasión algún miembro abandonaba el grupo, no seguirán como tal, al final decidieron tirar adelante como trío. Michael Stipe lo resumió en una frase todo lo juiciosa o todo lo estúpida como se quiera considerar: "Un perro sigue siendo un perro aunque sólo tenga tres patas". Para mi gusto, dos aciertos, el primero, continuar, el segundo, no fichar a un cuarto miembro y usar músicos de sesión. Berry era un tipo que seguramente tenía un gran peso específico en lo sentimental y el lo que a cohesión personal entre los miembros de R.E.M. se refiere, pero no a nivel musical ni compositivo.

El trío más exitoso desde Los Panchos


Esta ausencia, casualidad o no, marcó un punto de inflexión. En 1998 reaparecía R.E.M., formado ahora por un Michael Stipe superestrella, por un Mike Mills con ganas de reivindicarse y por Peter Buck, sobrio y efectivo. Y el resultado se llamó "Up". Y con él, llegó la polémica. Hubieron cambios en el sonido, abandonaron las estructuras rockeras, coquetearon con sonoridades más "modernas", se deshicieron del productor que había estado con ellos desde "Document" (1987), Scott Litt, publicaron las letras en el libreto del CD. Pero sobretodo, "Up", más que un disco de R.E.M., es un disco de Stipe, de Mills y de Buck, grabado como individualidades más que como un grupo. Pese a todos esos cambios, el tiempo ha jugado a su favor. "Up" no es un disco fácil, no engancha a la primera, pero es un buen disco, y contiene algún momento magistral, como "At my most beautiful". Lo único que recuerda a los R.E.M. más populares, de inicios de los 90's, fue el single "Daysleeper", nada para tirar cohetes, pero decidida inteligentemente como tal por la compañía. El disco, pues, no convenció a la gran masa consumidora de discos como "Automatic for the people", y tambien muchos de sus fans de toda la vida se quedaron con cara de póker. Pero insisto, se trata de un trabajo que vale la pena repescar. (continuará)

Canciones:

R.E.M.: "The Wake-Up bomb"
R.E.M.: "Suspition"
R.E.M.: "Lotus"

4 comentarios:

Belén dijo...

Espero la segunda parte... no fueron un grupo muy importante en mi vida,pero he de reconocer que les tengo cariño...

besicos

Anónimo dijo...

Muy de acuerdo con lo que cuentas pocos grupos pueden presumir desde mi punto de sacar cinco discos seguidos de la talla de "Document" "Green" "Out of time" "Automatic for the people" y por supuesto el más rockero "Monster", luego vino na clara "decadencia", sólo algún tema aislado pero nunca he perdido la confianza en que puedan volver a noquear al público mundial con una futura obra. Esperamos tu segunda parte.

kar dijo...

Cinco discos no, seis, amigo, que te dejas "Life's rich pageant"!!

segunda parte en breve...

saludos y besos

Anónimo dijo...

Segunda parte ya!